Rhonita Miller y cuatro de sus hijos fueron asesinados en el ataque contra los vehículos en que viajaban. Foto: Law Enforcement Today.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ofreció ayuda a México para hacerle frente a los cárteles de la droga, tras un ataque a una familia mormona méxico-estadounidense que dejó un saldo de nueve fallecidos: tres mujeres y seis niños.

Autoridades mexicanas confirmaron que el ataque del lunes 4 de noviembre contra integrantes de la familia LeBarón, un grupo de mormones con doble nacionalidad asentada desde hace generaciones en el norte de México, ocurrió en los límites de los estados fronterizos de Sonora y Chihuahua, con Estados Unidos, una zona montañosa conocida por sus bandas criminales.

“Este es el momento para que México, con la ayuda de EE.UU, le declare la guerra a los cárteles de la droga y los borre de la faz de la Tierra. ¡Simplemente esperamos una llamada de su nuevo gran presidente!”, escribió Trump en Twitter.

El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, confirmó en esa plataforma que habló por teléfono con Trump para dar el pésame a los deudosde la familia LeBarón en Estados Unidos.

“Envié mi más profundo pésame a los familiares y amigos de quienes fueron asesinados en los límites de Chihuahua y Sonora. Le agradecí su disposiciónde apoyarnos y le informé que las instituciones del Gobierno de México actúan para hacer justicia”, escribió el mandatario.

Durante su conferencia de prensa diaria, el presidente mexicano descartó que su gobierno busque una guerra con los grupos criminales como lo planteóTrump.

La guerra es lo peor

“En eso no coincidimos, los que tienen esa manera de pensar, se les respeta, pero no va de acuerdo con nuestras convicciones, lo peor que puede haber esla guerra (…) La guerra es sinónimo de irracionalidad”, dijo en una conferencia de prensa.

Agregó que lo que sí quería era cooperación para reducir el flujo ilícito de armas estadounidenses a México, “porque la mayor parte de las armas queentran a México de alto calibre provienen en un 75% de Estados Unidos, principalmente de Texas”.

El ministro de seguridad, Alfonso Durazo, confirmó que la agresión también dejó un saldo de seis niños lesionados y una menor desaparecida. En la familia LeBarón predominan personas de cabello rubio y ojos de color.

Por decisión de la familia LeBarón, tres adultos y cinco de los menores lesionados fueron trasladados de Sonora a la ciudad estadounidense de Phoenix, en Arizona, apoyados por las fuerzas armadas mexicanas.

De acuerdo con Durazo, el ataque a la familia LeBarón, acontecido en Rancho de la Mora, pudo ser el resultado de “una confusión” de grupos delictivosque se disputan el control de la región.

En esa zona opera una subgrupo del cártel de Sinaloa, llamado Los Jaguares, que se disputa la zona con una escisión de esa misma célula que estaríaapoyada por el poderoso cartel Jalisco Nueva Generación o La Línea, dijo este mismo martes a la prensa, el fiscal de Chihuahua, César Augusto Peniche.

Las mujeres viajaban cada una en una camioneta con los niños.

“Como viajaban en una especie de convoy tres vehículos de civiles probablemente fueron confundidos con un grupo rival”, añadió el fiscal.

Tragedia familiar

Julián LeBarón, uno de los líderes del grupo religioso, dijo que sus familiares localizaron una de las camionetas donde viajaban las víctimas totalmentecalcinada.

Interrogado sobre quiénes podrían ser los agresores, dijo que se trata de una “zona de guerra” donde actúan cárteles de las drogas y todo tipo de “matones”.

Los LeBarón son parte de una comunidad de mormones acogida por México a finales del siglo XIX tras ser perseguidos en Estados Unidos por sutradiciones, en especial la poligamia.

Con el recrudecimiento de la violencia ligada al narcotráfico en la década pasada, estas comunidades se vieron afectadas y Benjamín LeBarón, hermanode Julián, se convirtió en un activista al formar la organización SOS Chihuahua que denunciaba grupos criminales.

Benjamín fue asesinado por un comando armado junto con su cuñado en julio de 2009 tras encabezar manifestaciones por el secuestro de su hermano de 16 años.

Los mormones se negaron a pagar el rescate y el joven LeBarón fue finalmente liberado.

Los hechos

Julián LeBarón, uno de los jefes de la comunidad y quien denunció el ataque dijo que una menor que estaba desaparecida fue localizada ilesa a 15 millas del sitio del ataque.

LeBarón dijo que tras la reconstrucción de los hechos están convencidos de que fue un ataque directo contra las mujeres, que viajaban conduciendo cada una de ellas una camioneta con niños a bordo.

“Le abrieron fuego en cuanto (la camioneta) empezó a subir el cerro (…) suponemos que después de dispararles fueron a quemarlos”, relató LeBarón, cuya familia suma unas 5.000 personas.

Otra de las mujeres atacadas “salió del vehículo y levantó los brazos y le dispararon a quemarropa”, añadió con voz consternada LeBarón.

El cuerpo de la tercera mujer fue localizado dentro de la camioneta y bajo su regazo su bebé de unos meses, que logró ser rescatado con vida.